“Dices que si yo no te
hubiera dejado esa noche
No tendrías que marcharte
porque esa misma noche encontraste
un nuevo amor que llegó a Ti
y que parecía que estabas esperando
mi momento de partir”
y que parecía que estabas esperando
mi momento de partir”
Siempre tuviste la certeza
de que este amor sagrado
era demasiado para Ti,
Los pisques no tenemos cadena,
ni ataduras de marfil.
Los psique tenemos alas doradas
que nos permite amar vivir y soñar
no tenemos prejuicios vivimos en libertad.
No entiendo porque hablas de amores,
si jamás los conociste,
tu solo sabes de tentaciones que te hacen mitigar
la crueldad que hay en tus
canas y en aquella soledad
que te grita en silencio que por siempre en Ti estará.
Desnudaste ante mis ojos tu alma
y no pudiste ocultar tu búsqueda constante,
Prisionero de tus confusos sueños, de tu sombra,
ni siquiera Tú sabes lo que buscas,
solo cuando te encuentres a
ti mismo
alcanzarás la paz y la gloria anhelada
ahora se desnudan tus palabras en los labios
eres verbo que fluye
removiendo recuerdos
de un amor sin medida.
¡burbuja de sueños y quimeras!
No ves que ahora sueño solamente una milésima de instante
atravesar el umbral de todos los misterios,
aparearte en mis sentidos,
y poner para siempre un cerrojo de auroras
con sabor a despedida que vivirán por siempre en mi alma.
Te dije, no temas, no habrá lágrimas amargas,
ahora solo hay quietas olas de nostalgia en mi alma
que invaden este olvido
Asoreth
Esa noche, nunca sabre si te quíse de verdad, o te perdí para siempre,
ResponderEliminarY cuando es siempre? decimos cosas que ni el alma entiende, porque las penas no son penas cuando con pena hay AMOR.
Un suspiro hecho pasion me conmueve al leerte.